Es bien conocida ya la miopía selectiva de la que hacen gala los grandes medios corporativos a la hora de presentarnos los acontecimientos que se desarrollan en el mundo. Las víctimas inocentes son ocultadas o resaltadas en función de a quién pueda beneficiar su muerte. De esta forma, por ejemplo, los 40 niños y cientos de víctimas civiles asesinadas en el sureste de Ucrania por las balas y los bombardeos del ejército neonazi de Kiev – patrocinado por la OTAN – son invisibles a los ojos de los mercenarios mediáticos occidentales. Esta semana el ejército ucraniano – que viola constantemente su «tregua» trampa utilizando incluso armas químicas – abrió fuego contra un autobús lleno de periodistas rusos cerca de un cuartel militar en Donetsk matando al veterano camarógrafo Anatoli Klián (ver vídeo). Son ya 5 los periodistas asesinados en el este de Ucrania. Los fascistas apoyados por EE.UU y la UE no quieren testigos incómodos que difundan sus crímenes. Los periodistas de los grandes medios occidentales no parecen muy preocupados por estos hechos. Una sola víctima se convierte en un hecho intolerable y digno de condena política y mediática internacional si el responsable del hecho es un gobierno soberano que no se somete a las órdenes de Washington. Cientos de víctimas inocentes se convierten en invisibles o en «daños colaterales» si el responsable cuenta con el apoyo de EE.UU y sus títeres europeos. Así de cruel y de cínico es su comportamiento.
Los datos de esta criminal operación militar llamada «Guardián del Hermano» hablan por sí mismos y por desgracia las cifras de la masacre aumentan cada día. En estos momentos son ya 12 personas asesinadas por el régimen de Israel – incluido niños -, son cientos los heridos graves debido al bombardeo israelí sobre la Franja de Gaza (el pasado 26 de junio se cumplieron 8 años de asedio y bloqueo de Gaza, donde un 70% de sus casi dos millones de habitantes viven por debajo del umbral de la pobreza), son 600 las personas detenidas sin justificación ni garantías judiciales, además se producen de forma masiva allanamientos a miles de hogares y la demolición de cientos de viviendas palestinas. Más de 200 palestinos secuestrados (no pueden calificarse como «detenidos») están en huelga de hambre desde el 24 de Abril pasado en defensa de sus derechos humanos más básicos y contra la ilegítima «detención administrativa» que permite a Israel retener indefinida y arbitrariamente a cualquier ciudadano palestino sin levantarle cargos y sin permitirle asistencia legal. Ni que decir tiene que si un sólo «opositor anticastrista» bien pagado en dólares se pusiera en «huelga de hambre» en Cuba se enteraría todo el planeta, como ya ocurrió en otras ocasiones anteriormente.
En los últimos 14 años Israel ha asesinado a 1.500 niños palestinos, y más de 10.000 menores palestinos han sido arrestados y 200 se encuentran bajo detención israelí sufriendo maltratos físicos y psicológicos sin que los gobiernos occidentales, los medios de comunicación y las instituciones políticas y tribunales internacionales hayan hecho y dicho nada al respecto (ver vídeo). La autoridad israelí es la única autoridad en el mundo que procesa en tribunales militares a niños sin ni siquiera asegurarles un juicio justo y con garantías. A pesar de todo esto el régimen de Israel es considerado una «democracia» y su gobierno es un «aliado» de las «democracias» occidentales y los grandes medios de comunicación. Claro que EE.UU no está tampoco en condiciones de dar lecciones a nadie, puesto que hasta el año 2005 muchos niños detenidos en EE.UU eran condenados a la pena de muerte y hoy en día muchos niños cumplen cadena perpetua en las cárceles estadounidenses. ¿Qué ocurriría, qué dirían y qué harían los medios corporativos y gobiernos occidentales si estos hechos ocurrieran en Cuba o Venezuela, por ejemplo?
(…) En marzo de 2013, un informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés) indicó que los niños palestinos arrestados por el ejército del régimen israelí son sistemáticamente maltratados, hecho que viola, de manera flagrante, el derecho internacional. Otro informe de Unicef corrobora que solo el régimen usurpador de Tel Aviv procesa sistemáticamente a los niños en los tribunales militares y les somete a castigos brutales e inhumanos (…).
Finalmente este lunes han aparecido cerca de la ciudad de Al Khalil (Hebrón) los cuerpos de los tres colonos desaparecidos. Los medios de comunicación se han hecho eco ampliamente de esta noticia a diferencia del silencio que mostraron con la muerte de los palestinos en las últimas dos semanas. En teoría el argumento utilizado por el régimen de Israel para llevar a cabo esta criminal operación militar se ha agotado. Aunque en realidad nunca les ha hecho falta un «argumento» para asesinar inocentes en Palestina. Lo seguirán haciendo impunemente mientras cuenten con el apoyo de EE.UU y la UE. Ahora el «argumento» para continuar con el genocidio palestino será sencillamente la venganza. Venganza generalizada e indiscriminada independientemente de quiénes sean los responsables de la muerte de los tres colonos. De hecho esta misma madrugada del martes han vuelto a bombardear la Franja de Gaza lanzando hasta 30 ataques en 45 minutos, y han asesinado al joven de 16 años Yousef Abu Zaghah de un tiro en el pecho en el campamento de refugiados de Jenin, además de causar varios heridos. Y los medios de manipulación masiva harán todo lo posible para ocultarlo o para presentar estos crímenes contra la humanidad cometidos por el régimen sionista como una legítima lucha contra el «terrorismo», a pesar de que muchas de sus víctimas por su edad ni siquiera saben escribir y pronunciar esa palabra.